El dueño del local y artífice de la cocina, le puso el nombre de "El Arenero Taller de Tapas" en homenaje a su abuelo que fue arenero del río Guadalquivir, trabajando en el drenaje de las aguas, según cuenta en la carta. Las tapas muy bien presentadas y muy ricas. Buenísimo el salmorejo de remolacha con helado de hierbabuena y el ceviche peruano con espuma de lima. También el cochinillo con couscous, el salmón con sésamo y la mini hamburguesa de carne de toro y queso payoyo son una exquisitez. Uno de los días tenían una torrija de chantarellas (setas)que nos pareció todo un hallazgo.
Os recomiendo a que pidais para compartir y así podreis probar muchas más tapas acompañadas por una botella de tinto Barbazul (Cádiz), de otros vinos andaluces o de un albariño. Suele costar unos 15 euros por persona, que realmente para la calidad de lo que ofrecen está más que bien. Está en el barrio de Santa Cruz, en el Pasaje de Vila junto a Mateos Gago, y es como un soplo de aire fresco entre tanta oferta desafortunada para turistas. Te puedes sentar junto a la ventana, frente a la barra o en el bonito patio interior. Lo dicho, la Catedral, Mateos Gago, Bar Las Columnas y primera calle a la derecha e inmediatamente después a la izquierda.
Arenero - Taller de tapas
Pasaje de Vila 6
Sevilla
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