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martes, 30 de julio de 2013

La "bohemia" Playa del Carmen en la Riviera Maya, entre la "cool" Mamitas y la Quinta Avenida

Poco queda de la antigua aldea de pescadores que empezó siendo Playa del Carmen, a  68 kilómetros a sur de la bulliciosa Cancún. En los últimos 20 años se han levantado modernos condos (condominios como llaman allí a los apartamentos), hoteles, palapas con restaurantes, tiendas de souvenirs, centros comerciales....Todo es nuevo allí y está hecho con bastante gusto, dicen que es una de las ciudades que crece a mayor velocidad de todo México y uno de los ruidos más frecuentes es el de las obras que no paran. Hasta hace unos quince años la ciudad era poco más que un pequeño embarcadero con calles sin pavimentar y a pesar de su crecimiento todo el mundo coincide en que conserva un cierto espíritu bohemio, es decir que es más cosmopolita y sin duda mucho más bonita que Cancún aunque ya no es ninguna ganga.
Para empezar el día y después de desayunar los fantásticos croissants de la pastelería artesanal francesa Chez Céline hay que disfrutar de la preciosa playa de Mamitas, de moda y, naturalmente, de arena blanca y mar turquesa. Allí puedes ir con tu silla o alquilar uno de los "camastros" o hamacas que tienen los numerosos bares de allí como el Mamitas Beach Club o el Blue Parrot, este último considerado el mejor club del mundo por Newsweek. En estos clubs de playa te cobran por las tumbonas y te colocan una pulsera y a cambio puedes bañarte en sus piscinas y "te adoptará" un mesero (camarero) que cada cuatro minutos pasará por si quieres tomar una copa o comer algo, eso si carillo todo. Para hacerlo un día como mucho, mucho mejor andar unos minutos hacia la Quinta Avenida y comer pescado fresquísimo o un arroz con camarones en el  Kool Fish . Eso sí, Mamitas aunque de arenas finas y blancas, es una playa concurrida, plagada de hamacas y sombrillas y rodeada de las edificaciones en primer término. Particularmente, prefiero otros rincones cercanos como Paamul o Akumal para sumergirme en el Caribe.
La famosa Quinta Avenida de Playa del Carmen es un paseo imprescindible. Recorre la localidad en paralelo a la costa  con todo tipo de tiendas artesanales, de souvenirs o de marcas internacionales, terrazas, bares... Una temporada alta tras otra, se renuevan sus cientos de restaurantes- mexicanos, tailandeses, japoneses, argentinos, italianos- y boutiques, sus bares de copas y tiendas de artesanías. Hay que pasearla de arriba abajo, dejarse arrastrar por el fluir de la gente  que la recorre como si fuera un paseo marítimo, aunque sin vistas al mar. Lo mejor, si vamos al atardecer, es buscar algún regalito para la familia, tomarse en una cantina una margarita o un mezcal con gusanos tostados de magüey o una Corona y cenar algún plato típico yucateco en el restaurante Yaxche (Quinta Avenida con la calle 22) o una enchilada o un taco en la Cueva del Chango para  acabar sobre una hamaca en cualquier chiringuito de la playa. Es un buen sitio para disfrutar de la gastronomía porque hay una amplísima oferta.  Tras la Quinta Avenida se alinean una docena de calles bulliciosas que mezclan el antiguo y el nuevo México, donde vive la gente de Playa, hay restaurantes la mitad de baratos y se celebran festivales de cine donde grupos de rock musicalizan películas de John Ford. 
Hace unos años, el músico Fernando Toussaint inauguró el Festival de Jazz de la Riviera Maya, un evento que atrae hasta 20.000 personas al día. Considerado como uno de los más prestigiosos del mundo, puede que sea el único que se celebra en un Beach Club (Mamitas) a 20 metros del Caribe, sobre pareos y toallas, ha llevado hasta esta ciudad, a figuras como Herbie Hancock o Al Jarreau.
Playa del Carmen es un excelente lugar para alojarte si no buscas un resort con "todo incluido", con lugares con mucho encanto más económicos.  En Playa del Carmen se encuentra el servicio de transbordadores a la isla de Cozumel y también es un sitio perfecto para recorrer la Riviera Maya y las ruinas de Chichén Itzá, Tulum o Uxmal o las ciudades coloniales de Mérida o Campeche.

Riviera Maya Jazz Festival (www.rivieramayajazzfestival). Del 24 al 26 de noviembre. Playa del Carmen. Gratis.

Restaurante Kool Fish. 5ta Avenida Esquina con 38, Colonia Zazil-ha.  
"Chez Céline". 5ta Avenida con calle 34
Playa del Carmen, Quintana Roo, Mexico
Tel: (984) 803 3480
info@chezceline.com.mx

Las ruinas mayas de Chichén Itzá, una de las siete maravillas del mundo, en México

 

Puede que haya ruinas con más encanto como las de Tulum, junto al mar. o las de Uxmal más salvaje, pero sin duda la reina de las ciudades mayas es Chichén Itzá, sitio arqueológico en Yucatán, al sureste mexicano que cada año visita un millón de personas. En lengua maya significa: La orilla de los pozos de los itzáes o brujos del agua. Famoso por sus sacrificios humanos, Chichén Itzá fue el más importante centro ceremonial de los mayas en la provincia del Yucatán. Nada más entrar al recinto encuentras su impresionante explanada, salpicada de pirámides, el enorme campo para el juego de pelota y monumentos para comprender por qué los mayas lo tenían como un enclave sagrado para comunicarse con los dioses. Y por qué ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad y una de las siete maravillas del mundo. El juego de pelota era un deporte ritual de vida o muerte que acababa con la sangre derramada de los vencidos y a veces también de los vencedores porque el sacrificio era un honor en vez de una condena. El Templo Mayor se ubica sobre la estructura principal de la zona arqueológica, conocido como El Castillo o pirámide de Kukulcan, y es una gran pirámide de 55,5 metros por cada uno de sus cuatro lados, y con una altura de 25 metros. La pirámide tiene en cada uno de sus lados amplias escalinatas que conducen al templo. La más importante es la escalera norte, donde se observa cada año, en el equinoccio, un impresionante fenómeno astronómico, el descenso a tierra de una serpiente que se forma con la sombra del borde de la pirámide. Hasta hace unos años podía subirse a lo más alto de la pirámide por sus escalones estrechos y muy empinados pero en la actualidad está prohibida la ascensión. Parece fuera de toda duda que la ciudad fue abandonada en el siglo XIV  por causas desconocidas. Sin embargo, el poder y la grandeza de Chichén Itzá han sobrevivido a su historia y siglos después de su abandono los mayas siguen teniéndola como referencia mágico/espiritual y peregrinando hasta sus ruinas.  Muy cerca, en plena explanada, destaca el tzompantli, la Plataforma de los Cráneos,  donde se exhibían, ensartados en una pica, los cráneos de los enemigos abatidos. Otro de los puntos de mayor interés es el Cenote Sagrado, un enorme pozo de agua con una profundidad de 15 metros donde se dice que los mayas hacían sacrificios humanos, ofrendas y otros rituales religiosos.
También hay que ver  El Caracol, un sorprendente Observatorio Astronómico, el edificio de Las Monjas, La Iglesia… según los nombres que les dieron los españoles al descubrirlos. Para los mayas tenían otros significados, ya que Chichén Itzá representó la máxima expresión del poder divino en Yucatán.  El recorrido es de casi tres horas, es importante llevar ropa fresquita y que te proteja del sol y, durante el mismo, irás sorteando las decenas de vendedores de la zona que han dejado entrar al recinto y que te venden todo tipo de recuerdos "casi gratis", en especial un silbato que imita el sonido del jaguar y que es una auténtica pesadilla. Tambié encontrarás numerosas iguanas que campean a sus anchas por allí.
Desde Cancún se puede llegar perfectamente a las ruinas en coche tras dos horas de viaje (tres desde Playa del Carmen) por buenas carreteras-hay de pago y gratis, ambas están bien pero por las gratuitas vas sorteando pequeñas poblaciones-, además de en alguno de los cientos de viajes organizados de ida y vuelta que hay a diario. Pero si se prefiere dormir allí hay un montón de hoteles alrededor del recinto, en el cercano pueblo de Pisté. Una opción económica es el Hotel Dolores Alba, en plena selva con una piscina estupenda y bungalós limpios y con aire acondicionado, aunque desde luego sobrio y sin ningún lujo pero la habitación doble sale por unos 40 euros la noche. Para los más sibaritas hay otras muchas opciones más lujosas.
 
Dolores Alba Chichen Itza.  Km 122 Carretera Mérida- Cancún. Chichen Itzá97751 Pisté. Yucatán, México.  +52 999 928 5650
 

lunes, 29 de julio de 2013

Campeche, colonial y pirata, la ciudad amurallada de Yucatán, Patrimonio de la Humanidad



















Leyendas de piratas recorren la historia de Campeche, el Estado menos visitado de la península del Yucatán a pesar de que su preciosa capital San Francisco de Campeche fue declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 1999. Se trata de una ciudad amurallada, con casas de colores restauradas, que da al Golfo de México y que tiene un estupendo malecón en el mar pero no tiene playa. Fue fundada en 1540 por Francisco de Montejo que le dio un aire muy español, incluso puede recordar a Cádiz en muchas cosas . Debido a los continuos ataques de los piratas como Francis Drake, a los que apoyaban algunos países europeos para desestabilizar la corona española, los habitantes protegieron la ciudad con una muralla, dos fuertes y una serie de baterías defensivas. Campeche era el principal puerto de Yucatán para la exportación de maderas preciosas, algodón y cera. Gran parte de la antigua muralla se perdió a finales del siglo XIX, cuando la ciudad creció a causa de la bonanza económica que trajo el comercio del henequén (pita fibrosa ideal para cuerdas).  La puerta de tierra era la entrada principal y aún sigue siendo uno de los símbolos de la capital, construida en 1732 mantiene su imponente esplendor. Hoy la Puerta de Tierra es escenario de un espectáculo de luz y sonido en el que se reviven los pasajes históricos más importantes del estado. Recorrer los bien conservados baluartes, atalayas, almenas, torreones y fuertes de Campeche nos transporta al pasado y nos hace revivir por unos instantes el esplendor y riqueza de una época  En el zócalo o Plaza de Campeche hay una Oficina de Información Turística en la que te atienden con la hospitalidad característica de la gente de ese Estado y explican que hay que ver y como hacerlo, incluso el mejor momento para hacer un recorrido por la bahía en el famoso barco "Lorencillo", llamado así para recordar a uno de los piratas que azotó la zona, Lauren Graff “apodado Lorencillo.
Hay que recorrer la ciudad colonial metida dentro de la muralla, de calles adoquinadas llenas de casas de colores de techos altos y patios interiores; entrar en el Museo de Arquitectura Maya y recorrer la muralla desde arriba; detenerte en las librerías y tiendas, además de en la plaza central y en la Catedral. Fuera de los muros queda la parte nueva de la ciudad, junto a un malecón de tres kilómetros y medio con jardines metidos en el mar. Y no hay que olvidar la gastronomía porque en Campeche se come divinamente. Todo el Estado tiene una personalidad gastronómica muy bien definida ya que, según cuentan, la variada alimentación de los mayas se enriqueció aún más con la llegada de los españoles. El rey es el cazón, con él hacen panuchos, empanadas, tamales, tacos, y el famoso pan de cazón. El pámpano-una especie de cactus- en escabeche, los camarones al coco, al natural, en paté, en cóctel, en ensaladas y en platillos calientes también son muy habituales. El chile X´catic, típico de la región, lo hacen también relleno de cazón. De los cangrejos comen las patas en frío. También hay esmedregal, raya, papaché, sierra, pulpos, calamares, y muchos otros peces y mariscos. Una de las bebidas preferidas de Campeche y que el que va no debe dejar de tomar es el tanchuacá, una mezcla de maíz y cacao que se tomaba desde la época prehispánica. Yo recomiendo el restaurante La Pigua, dicen que uno de los mejores de la ciudad, para comer pescado. No es barato pero merece la pena el homenaje, sobre todo si se pide el famoso pan de cazón, el pulpo, las manos de cangrejo o los chiles rellenos. Para dormir hay un montón de opciones, una buena y económica es el hotel Plaza Campeche, en el centro de la ciudad.
Y no hay que olvidar que Campeche es la cuna, junto con Ecuador, de los famosos sombreros panamá o jipijapas. En Bécal, en la trasera de casi todas las viviendas, hay cavernas naturales de roca caliza que se usan como talleres en donde los artesanos mayas convierten sencillas fibras de palma en los atractivos sombreros que han hecho célebre a esta comunidad.  Como la Península de Yucatán es muy calurosa y las hojas de palma se tornan quebradizas bajo la luz solar, los artesanos tejedores de Bécal se ven obligados a trabajar en estas húmedas cavidades subterráneas, para así preservar la flexibilidad de las fibras.
Además al sureste del Estado se halla la reserva de la biosfera de Calakmul, declarada también patrimonio mundial de la Unesco. Gracias a la poca actividad humana, allí viven jaguares, tigrillos, monos y más de 300 especies de aves. Entre la tupida vegetación de la selva virgen casi intacta se encuentra un grupo de ciudades mayas comunicadas por senderos. Las playas de Campotón o Ciudad del Carmen completan la oferta. Por tanto, hay un montón de razones para visitar Campeche.

domingo, 28 de julio de 2013

Vino dulce y gambas, la receta del éxito de La Casa del Abuelo, una taberna centenaria en el centro de Madrid



La Casa del Abuelo se ha hecho famosa ofreciendo gambas y vino dulce en el centro de Madrid. Empezaron en la calle Victoria en 1906 y ya van por la cuarta generación de una familia que mantiene la tradición de servir gambas de Huelva y Melilla, al ajillo o a la plancha. La costumbre de poner gambas para el aperitivo la iniciaron en los años finales de la guerra civil cuando escaseaba la harina para hacer pan, más tarde comenzaron a traer el vino blanco y moscatel de Alicante que les ha hecho también famosos. El local pequeño y de azulejos tiene más de cian años y de cien mil leyendas. Cuentan que Andy Warhol y Dani de Vito -y muchos otros famosos- eran habituales durante sus paseos por Madrid, tanto por la exquisitez de los platillos como por su sencillez. Es uno de esos sitios del Madrid castizo que merece la pena visitar. Hay ya diferentes locales de La Casa del Abuelo en Madrid, pero son todos muy similares y no pierden ni un ápice de ambiente castizo ninguno de ellos. También se pueden pedir patatas bravas, gambas al ajillo, morcilla de arroz, pimientos verdes,  setas, las croquetas de jamón y por supuesto de gambas, tortilla de patatas o queso curado.  El horario de lunes a domingos es de 12 a 0 horas y los viernes, sábados y vísperas de festivo hasta las 2 horas. Lo ideal es ir prontito y entre semana, para evitar las aglomeraciones propias de  los fines de semana ya que el local es pequeño. Es un buen sitio para iniciar una ruta de tapeo por el centro de Madrid. La Casa del Abuelo ha sido incluida en numerosas guías turísticas de varios países europeos, americanos y asiáticos de manera que hay muchos turistas entre sus clientes asiduos a sus establecimientos. Cuando cumplió los primeros 100 años, el Ayuntamiento de Madrid le entregó una placa conmemorativa con un dibujo de Mingote (en la foto).
 
Bar La Casa del Abuelo
 calle Victoria 12,  Madrid

sábado, 27 de julio de 2013

Isla Mujeres, el puro Caribe de México



Es la esencia de una isla del Caribe, muy cerca del horror en que se ha convertido Cancún al que llaman "el otro México". En la época de la civilización Maya, Isla Mujeres era considerada un sitio sagrado en dónde se adoraba a la diosa "Ixchel" (conocida como la madre de los dioses, diosa de la luna y protectora de la fertilidad). En 1517, el conquistador español Francisco Hernández de Córdoba llegó a la Isla y debido a la gran cantidad de representaciones femeninas que ahí se encontraron se le bautizó con el nombre de Isla Mujeres. En la actualidad, es famosa por los impresionantes escenarios naturales que ofrece y las hermosas vistas del mar Caribe, debido a su altitud, especialmente en el lado sur, en donde hay una importante formación rocosa natural contigua al arrecife Garrafón y es el acantilado más elevado sobre el nivel del mar en toda la Península de Yucatán.

Isla Mujeres cuenta con vestigios arqueológicos y parques marinos con increíbles arrecifes naturales para los amantes del buceo. Una de las mejores es la Playa Norte, reconocida como el mejor sitio para disfrutar del mar cristalino y transparente y para practicar deportes acuáticos. Asimismo, el lugar cuenta con otros sitios naturales muy bellos como la Granja Tortugas, la mayor reserva de tortugas gigantes de mar o el Parque Garrafón donde se halla un gran arrecife de coral. Además, la Isla Mujeres posee varios lugares turísticos relacionados con la historia del lugar, siendo el más destacado el Mirador Punta Sur, un acantilado en donde se pueden observar restos de la cultura Maya y convivir con decenas de iguanas mientras te tomas una cola de langosta con una cerveza corona a buen precio. La isla está a solo 13 kilómetros de Cancún, unos 15 minutos, y los ferrys salen desde Punta Sam o de Puerto Juárez, es pequeñita-unos 7,5 kilómetros aunque alberga a unas 17.000 personas que sobre todo viven del turismo. Antaño fue refugio de piratas y en los años 70 se hizo famosa por la cueva de los tiburones dormidos, a 30 minutos en lancha de la isla, donde se pueden ver tiburones en estado de somnolencia pero a donde solo se puede acceder si eres un experto buceando. La isla un lugar único y espectacular, reconocido en todo el mundo porque combina la belleza de sus paisajes naturales, donde florece la selva tropical, con las playas de arena blanca y mar de color turquesa. Solo un problema si vas desde Cancún solo un día y no para quedarte ya que de unos años a esta parte la han convertido en un negocio de particulares. La isla está pesada para comprar "un paquete" de esnórkel o buceo, comida en un sitio determinado y un rato libre para compras en el pueblo, de otra manera es complicado esnorquelear por libre porque hay muchos tramos de playas privadas. De cualquier manera es magnífica la visita y si se puede recorrer la isla en uno de los numerosos carritos de golf que alquilan. Una recomendación, escuchar la canción "Isla Mujeres" de Javier Ruibal y tomar una copita al atardecer en el Café del Mar en la playa.

Tartan Roof, la terraza del Círculo de Bellas Artes, un lujo veraniego con las mejores vistas de Madrid
























Las espectaculares vistas de Madrid están entre las mejores que se pueden disfrutar y solo por ello merece la pena pagar los 3 euros que vale la entrada. Pero Tartan Roof, la terraza del Cículo de Bellas Artes es además un sitio ideal para tomar una copa o degustar platos vanguardistas. Hay una zona chill out con buena música para disfrutar de las vistas y de la puesta de sol urbana recostado en una cama y un restaurante con muy poquitas plazas para probar exquisiteces como  escabeche de pato y vinagreta de mahonesa morada , taquitos de lubina fritos en harina de garbanzo con curry rojo o hamburguesa de ternera, tomate confitado y panceta,  cucuruchos de croquetas semilíquidas de jamón ibérico o de chanquetes o tacos de cerdo ibérico, una oferta gastronómica a cargo del chef Javier Muñoz-Calero ( Perrito Faldero de moda en Madrid), inspirada en la comida callejera -strreet food-.  La  Azotea del Círculo está encima de siete plantas dedicadas a la cultura en forma de exposiciones, proyecciones de cine, presentaciones de libros y talleres. Y la misma Azotea acoge eventos culturales programados por el CBA como el ciclo Jazz Círculo y Las Noches Bárbaras.  Hasta ahora, podía visitarse como un espacio más dentro del Círculo de Bellas Artes: se subía en ascensor hasta el último piso para ascender al cielo madrileño, en la azotea del edificio proyectado por el arquitecto Antonio Palacios e inaugurado por Alfonso XIII el 8 de noviembre de 1926, ahora hay un aliciente más.

La carta de Tartan Roof se estructura en: ‘Verrines’ (vasitos o tarros), como el Gazpacho de varios tipos de tomates (7 euros); ‘Bowls’, como el huevo a baja temperatura plancha con arroz basmati, sésamo, jengibre, ‘lemon grass’ salteado con verduritas y salsa de ostras (12 euros),  y el apartado estrella de la oferta, ‘Fast  street food’, platos servidos con bastones fritos de patata agria ecológica y camote. Una comida o una cena oscilan entre los 25 y los 40 euros por persona. La carta de vinos ha sido diseñada por Alberto Fernández Bombín.
 
Tartan Roof, Círculo de Bellas Artes. Calle Marqués de Casa Riera, 2 (Metro Banco de España). Teléfono de reserva: 672.557.171. Sirven desayunos, comidas y meriendas, a partir de las 8:00. Dos turnos de cenas: a las 21:00 y a las 23:00. Pero también puedes subir sólo para tomarte una copa en su zona chill out (hasta la 1:00/3:00 según el día) mientras disfrutas de las vistas.

sábado, 6 de julio de 2013

Paamul, el paraíso escondido de la Riviera Maya mexicana



 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Paamul es una playa mágica, en el corazón de la Riviera Maya mexicana, que los mayas utilizaron en el momento álgido de su civilización como punto de traslado para el comercio con otras ciudades del Caribe. A sólo 20 kilómetros al sur del bullicio de Playa del Carmen, Paamul solo tiene un pequeño hotel con restaurante y piscina y unos pocos edificios con balcones y palapas, alguna de ellas a la venta, y áreas para aparcar caravanas además de palmeras rebosantes de cocos. Una bahía con mar azul turquesa, arena blanca e ideal para hacer  esnorquel ya que hay un arrecife cercano al que se llega fácilmente nadando. Además en junio y julio se puede disfrutar, con suerte, del espectáculo de ver a las tortugas desovar en la orilla del mar. La playa tiene forma de una pequeña bahía, el agua tiene un suave oleaje y algunas algas y vegetación coralina.
Su nombre significa "cerro o ruina destruida" y es un lugar seguro, sereno y tranquilo que, según cuentan, ha sido escenario de numerosos anuncios publicitarios. Esta ubicación se abrió al turismo hace 30 años, entre la selva y los arrecifes coralinos del Mar Caribe, mantiene una especial quietud aunque esta cerca de las mayores atracciones de esta zona de la costa de México como las ruinas de Tulum, Uxmal o Chichen Itza. Para llegar, si no se tiene coche, hay que tomar un "colectivo" o transporte público en Playa del Carmen y pedir al conductor que te avise cuando llegues. Te dejara en una carretera federal desde la que no se ve playa alguna pero te adentras por un camino de tierra y llegas a este pequeño paraíso, te encuentras con algunas casas rodantes y te enamoras al instante. Un consejo: hay que llevar cangrejeras porque hay rocas para adentrarse en el mar.

Paamul Hotel & Cabañas
Highway 307, 12 miles South of Playa del Carmen, between Xcaret and Puerto Aventuras.
Phone: (984) 875 1050, (984) 875 1053, (984) 875 1054