Cocina tradicional con un toque actual, es como definen los hermanos Cabrera lo que hacen en su nuevo restaurante "Sal Gorda", en la calle Alcaicería de la Loza, junto a la sevillana Plaza de la Alfalfa. Esto se traduce en platos como las fabes con cigalitas, el tartar de ventresca de atún, los garbanzos con bacalao, el burger de guiso de ternera, la ensaladilla de boquerones en vinagre, las navajas en escabeche de perdiz o la carrillera ibérica con crema de patata trufada además de unas espectaculares gambas al ajillo, entre otros. Tapas entre 3,70 y 7 euros y vinos andaluces (Niño León y Cortijo Aguilares de Ronda; Taberner de Cádiz y Tetas de la Sacristana de Almería), Ribera del Duero, Priorato, Jumilla, Valencia o el Bierzo que han seleccionado para que mariden con la comida. El local ocupa un céntrico y sencillo edificio de tres pisos que antes era una zapateria y tiene distintos ambientes, incluso un pequeño comedor como reservado en la planta de arriba junto a una pequeña terraza. Lugar agradable con mucho encanto, con una atención estupenda y un precio aún mejor hacen de Sal Gorda un lugar idóneo para volver y para recomendar. Hay que dejar un hueco para la tarta de dulce de leche y nueces o para la poleá, un postre muy sevillano que hacen muy muy bien. Ah y los cerveceros tienen un surtido de cervezas artesanales para probar. Los propietarios están también detrás de la pizzería La Mía tana, que lleva desde los 90 llenando cada día a pocos metros de allí.
Calle Alcaicería de la Loza, 17, 41004 Sevilla
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