Etiquetas

sábado, 9 de febrero de 2013

East Side Galery, en el muro de Berlín, la mayor galería al aire libre del mundo, en memoria de la libertad

Miles de turistas visitan a diario la East Side Gallery de Berlín para intentar revivir cuatro décadas de historia, de historias de espías a uno y otro lado, anécdotas o intrigas. Ocupa más de un kilómetro de muro lleno de alegatos por la paz y la reunificación de la ciudad, con imágenes ya tan famosas como la del beso entre Breznev y Honecker y, por su extensión, es la mayor galería de arte al aire libre del mundo. En 1989 cayó, por fin, el conocido como "muro de la verguenza" y las obras fueron pintadas meses después, en 1990, por un centenar de artistas de 21 países, con pinturas en spray y pinceles para celebrar ese acontecimiento y la reunificación de los berlineses. 
Parece que una mañana de verano, el artista chileno Cesar Olhagaray abrió el periódico y encontró entre sus páginas una convocatoria que suscitó su interés. Animaba a los artistas de la ciudad a unirse a un innovador proyecto: dar una segunda oportunidad al Muro de Berlín pintando murales a lo largo de sus grises paredes. Sin pensárselo dos veces, este artista plástico, víctima de la dictadura de Pinochet en su Chile natal, se puso en manos a la obra y se interesó por participar en el proyecto y así fue como poco más o menos ocurrió con otros pintores que le muchos.  Se pueden encontrar obras realmente buenas a lo largo del muro, aunque entre las más conocidas está la ya mencionada pintura del líder ruso Leonid Brezhnev besando apasionadamente a Erich Honecker, su homólogo líder de la República Democrática Alemana, pintado por el artista ruso Dimitry Vrubel y la imagen de un Trabant (el coche utilizado en la alemania oriental) atravesando el muro, de Birgit Kindel.
En 2009 se restauraron las obras, erosionadas por el vandalismo, la contaminación y el clima, pero con polémica porque algunos de los artistas se negaron a colaborar en repintarlas al considerar que sus creaciones habían sido destruidas y dañadas por el abandono de las autoridades. Entre los artistas que participaron de forma espotánea en esta galería, está el ilustrador español Ignasi Blanch y Gispert que hizo la pintura Parler D,Amor. Esta doble línea de adoquines, que se levanta cuatro metros sobre el suelo, recorre esta zona del rio Spree recordando los lugares por donde un muro separaba, no sólo dos mundos, sino también familias, amistades, trabajadores de sus fábricas o noviazgos. Tras el trabajo de este centenar de artistas, el recuerdo se convirtió en imágenes que destilaban esperanza, euforia y libertad.  
En Berlín, por toda la ciudad, hay murales urbanos para todos los gustos: furtivos, macarras, de autor, conceptuales, irreverentes, inconformistas, publicitarios y hasta protegidos por las autoridades, caso de los de esta pecular galería. Es dificil entender la ciudad sin hacer un recorrido por sus grafitis. Al final del muro hay una tienda de recuerdos, y el puente Oberbaumbrücke. Tras cruzar el puente, se ve la escultura Molecule Man al horizonte, al lado izquierdo, y unos graffitis del artista italiano Blu, al otro lado del río, también a la izquierda. En el barrio de Kreutzberg se pueden ver muchos más grafitis pero el mérito de la East Side Galery es que reune cien visiones emotivas de artistas de la época sobre libertad, derechos humanos y los sentimientos del pueblo alemán en aquel momento, distintas entre si pero que se complementan.

Dirección: Mühlenstraße, 10243 Berlin, Alemania
Teléfono:+49 172 3918726.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario