Imposible recorrer California sin parar en San Francisco y sin reparar en su mayor icono: el Golden Gate que en 2012 cumplió 75 años. Hay que cruzar a pie o en bicicleta el mítico puente, erigido en 1937, viendo los buques de carga pasar entre las torres naranja, y contemplando las vistas de los escarpados cabos de Marin, con los rascacielos de la ciudad al fondo y la isla de Alcatraz. El Golden Gate Bridge (Puente de la Puerta Dorada) es un puente colgante de 2,7 kilómetros de longitud que debe su nombre al estrecho que atraviesa, también llamado Golden Gate . El puente une la península de San Francisco por el norte con el sur del condado de Marin-donde está el precioso pueblo turístico y bohemio de Sausalito- y fue construido entre 1933 y 1937 cuando el sistema de ferries se vio colapsado por el gran crecimiento de la población a finales de la Primera Guerra Mundial. 
Es un amasijo de acero rojo anaranjado (se pintó para evitar la oxidación producida por el océano Pacífico y para que los marinos pudieran verlo con facilidad), está suspendido de dos torres de 227 metros de altura y tiene una calzada de seis carriles con algunos protegidos accesibles para peatones y bicicletas. Su ‘look’ requiere de no pocos esfuerzos ya que su pintura debe ser retocada casi a diario porque el contenido salino del aire corroe los componentes de acero que lo integran. Como anécdota, decir que los vientos y mareas a los que se halla sometida su ubicación hicieron que los alambres de acero utilizados para su construcción tuviesen una desmedida longitud, la suficiente para rodear la tierra tres veces. El escepticismo de los ingenieros y ecologistas de la época determinó que dichos alambres fuesen cinco veces más fuertes de lo necesario. Su singularidad le ha hecho acreedor de toda una leyenda, y ha protagonizado películas, canciones y novelas. El puente ha ‘actuado’ en numerosas películas entre las que destacan Panorama para matar, en la que Grace Jones y el implacable 007 mantienen una férrea lucha colgados de su estructura, y Vértigo, en la que un inspirado Hitchcock escoge su estructura como telón de fondo para un valeroso James Stewart salvando a Kim Novak del oleaje de Fort Point. En sus 75 años de historia también ha sido devorado por un tiburón Mega Shark vs Giant Octopus, ha sido movido mentalmente por Magneto de X-Men y ha visto emerger a tres Black Hawk (La Roca). Pero además de protagonizar películas e inspirar a escritores, cantantes y poetas, también se ha hecho famoso por ser uno de los lugares preferidos de los suicidas. Más de 1.500 personas han perdido la vida tras arrojarse desde el puente. Las autoridades están sopesando la posibilidad de poner una valla metálica para impedir que la gente salte.
Ya en la ciudad, se pueden pasar días enteros en el parque Golden Gate, descubriendo sus secretos, como el estanque con barquitos o el pabellón de té japonés; permitirá profundizar en la conciencia ecológica de la ciudad y sus innovadores museos de arte. Los domingos, el parque es un paraíso que concentra todo lo que les gusta a los habitantes de San Francisco: espíritus libres, música gratis, secuoyas, frisbees, manifestaciones, arte, bonsáis y búfalos. Los amantes del deporte tienen a su disposición desde carriles bici a senderos ecuestres, un campo de tiro con arco, campos de béisbol, estanques de pesca con mosca, boleras…. Por todo el parque y sus alrededores se alquilan bicicletas y patines. Para visitar el Golden Gate, si vienes de la zona centro de San Francisco, por Marina Boulevard, en el barrio costero de La Marina, antes de tomar la autopista de la ruta US 101, deberás tomar por la derecha la calle Old Mason, que lleva a un primer aparcamiento al pie del puente. Desde ahí se disfrutan las primeras vistas panorámicas de cerca y, además, la posibilidad de acceder andando al puente para hacer un recorrido a pie.
Es un amasijo de acero rojo anaranjado (se pintó para evitar la oxidación producida por el océano Pacífico y para que los marinos pudieran verlo con facilidad), está suspendido de dos torres de 227 metros de altura y tiene una calzada de seis carriles con algunos protegidos accesibles para peatones y bicicletas. Su ‘look’ requiere de no pocos esfuerzos ya que su pintura debe ser retocada casi a diario porque el contenido salino del aire corroe los componentes de acero que lo integran. Como anécdota, decir que los vientos y mareas a los que se halla sometida su ubicación hicieron que los alambres de acero utilizados para su construcción tuviesen una desmedida longitud, la suficiente para rodear la tierra tres veces. El escepticismo de los ingenieros y ecologistas de la época determinó que dichos alambres fuesen cinco veces más fuertes de lo necesario. Su singularidad le ha hecho acreedor de toda una leyenda, y ha protagonizado películas, canciones y novelas. El puente ha ‘actuado’ en numerosas películas entre las que destacan Panorama para matar, en la que Grace Jones y el implacable 007 mantienen una férrea lucha colgados de su estructura, y Vértigo, en la que un inspirado Hitchcock escoge su estructura como telón de fondo para un valeroso James Stewart salvando a Kim Novak del oleaje de Fort Point. En sus 75 años de historia también ha sido devorado por un tiburón Mega Shark vs Giant Octopus, ha sido movido mentalmente por Magneto de X-Men y ha visto emerger a tres Black Hawk (La Roca). Pero además de protagonizar películas e inspirar a escritores, cantantes y poetas, también se ha hecho famoso por ser uno de los lugares preferidos de los suicidas. Más de 1.500 personas han perdido la vida tras arrojarse desde el puente. Las autoridades están sopesando la posibilidad de poner una valla metálica para impedir que la gente salte.
Ya en la ciudad, se pueden pasar días enteros en el parque Golden Gate, descubriendo sus secretos, como el estanque con barquitos o el pabellón de té japonés; permitirá profundizar en la conciencia ecológica de la ciudad y sus innovadores museos de arte. Los domingos, el parque es un paraíso que concentra todo lo que les gusta a los habitantes de San Francisco: espíritus libres, música gratis, secuoyas, frisbees, manifestaciones, arte, bonsáis y búfalos. Los amantes del deporte tienen a su disposición desde carriles bici a senderos ecuestres, un campo de tiro con arco, campos de béisbol, estanques de pesca con mosca, boleras…. Por todo el parque y sus alrededores se alquilan bicicletas y patines. Para visitar el Golden Gate, si vienes de la zona centro de San Francisco, por Marina Boulevard, en el barrio costero de La Marina, antes de tomar la autopista de la ruta US 101, deberás tomar por la derecha la calle Old Mason, que lleva a un primer aparcamiento al pie del puente. Desde ahí se disfrutan las primeras vistas panorámicas de cerca y, además, la posibilidad de acceder andando al puente para hacer un recorrido a pie.
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