Taxco, en México, donde el turismo y la plata hacen esquina

Su nombre significa algo así como el lugar donde se juega a la pelota, está a 170 kilómetros de México DF, y es uno de los llamados "pueblos mágicos". Es famoso por sus minas de plata y por su tradicional noche de los difuntos. Entre lo primero que conocieron los españoles cuando llegaron a Mexico fue Taxco. El ambiente en la víspera del día de muertos es de una fiesta, hasta que empieza el lúgubre tañer de las campanas con su conjuro mágico ; las almas de ultratumba se presentan y los vivos se congregan ante los despojos mortales de los desaparecidos. Negras siluetas van apareciendo por doquier, van llegando almas piadosas con las ofrendas, cortan flores, llevan dulces, consagran alimentos como: panes, dulces o frutos.

Con ellas erigen un altar sobre la tumba y se sientan resignadas y llorosas a contemplar las llamas de los cirios y hacer oraciones por los muertos. A intervalos se arrodillan ante la cruz que preside el rito, y quedan pensativos como evocando a los difuntos añorando su presencia. En los días previos a esta conmemoración, los taxqueños se prepararon para recibir el alma de sus familiares y amigos en sus hogares con la colocación de los tradicionales altares, la foto de los que ya partieron y las imágenes de los santitos, principalmente la de Cristo y la Virgen de los Dolores. En las ofrendas, colmadas de viandas, pan, tortillas, mole rojo y verde, con jumiles en salsa verde y carne de puerco, el café, los tamales, el tequila, las frutas, los dulces de calabaza, el copal, las flores y las flamas de las velas que alumbraron el camino por donde vinieron las almas de sus "muertitos". Taxco de Alarcón, también conocido como "la capital mexicana de la plata", es también famoso mundialmente por su joyería y sus representaciones artísticas realizadas en este precioso metal por los artesanos locales. La plata, antes abundante en las minas de los barrios de San Miguel (Tlachcotecapan) y Guadalupe (Acayotla), fue un factor clave en la fundación de Taxco; de hecho, fue el primer centro minero del continente americano. Ahora, Taxco es uno de los puntos del ‘Triángulo del Sol’, que –junto con Acapulco e Ixtapa-Zihuatanejo en la costa pacífica– son los centros turísticos más importantes del estado de Guerreo. Aunque Taxco no tiene playa, atrae a muchos turistas por sus artesanías, su estilo colonial y sus calles empedradas, además de su clima cálido-húmedo y una temperatura media de 19°C. Taxco cuenta con varios atractivos turisticos como son su zocalo, sus calles estrechas y empedradas, sus casas blancas con techo de teja, su mercado de artesanias, el Cristo del Atache y su vista panorámica, el teléferico, sus museos y sus iglesias, entre las cuales destaca una de las más bellas de mexico: Santa Prisca, una auténtica joya del estilo churrigueresco mexicano .En las callejuelas adyacentes, con un extraño aire de bazar colonial, se suceden tiendas con letreros que anuncian joyerías de plata: mercado de plata, taller y tienda... el interior es un auténtico sueño: anillos, pulseras, pendientes, abrecartas, platos, marcos de plata... miles de años de tradición retomada en los años 30 por el canadiense William Spratling, después de que el español José de la Borda comenzara en el siglo XVIII a explotar las minas de esta localidad. Fue esa gestión la que confirió su particular esplendor a este pueblo colonial, que se plasmó en bellos edificios como el mudéjar de la Casa Villanueva, o iglesias como la de la Santísima Trinidad, o de la Virgen de Guadalupe... una arquitectura a la que se añaden anónimas edificaciones de colores andaluces. Taxco se localiza a 62 km de Cuernavaca. Desde la Ciudad de México se puede llegar por la carretera federal núm. 95 que pasa por la capital de Morelos.