lunes, 21 de septiembre de 2015

El Barril de las Letras, pescado de primer nivel en el barrio con más encanto del viejo Madrid

Cerca de la Plaza de Santa Ana, en el barrio de Las Letras de Madrid a pocos metros de la casa de Lope de Vega, está este estupendo restaurante con un pescado y un marisco espectacular. Tiene amplios ventanales, columnas de hierro, suelo de losetas hidraúlicas, paredes de ladrillo visto y una decoración nítida, entre industrial, castiza, retro y confortable. El Barril de las Letras  no es un restaurante barato pero se compensa con la calidad de los productos y el servicio. No tiene florituras en la cocina que elaboran, los platos son más bien de estilo tradicional y sencillo, son especialistas en arroces-que no he probado- pero los calamaritos , el pulpo a la brasa y los pescados están de primera y tiene una amplia bodega.  Tienen lo mejor de cada zona de España: gamba blanca de Huelva, nécoras y centollos gallegos, boquerones de Málaga, merluza gallega-siempre se dice de Madrid que es el mejor puerto del país-...y hasta panes artesanos. Además del comedor, el local tiene una barra cómoda que invita al relax y una terraza de verano. Si hay que ponerle algún pero es el ruido que hay dentro cuando el local está lleno, que supongo que es casi siempre por la noche. 
Acudir a este restaurante tiene además un añadido, el paseo por el precioso barrio de Las Letras donde cada vez que vas descubres algo nuevo. Esta zona ha dejado atrás su pasado de abandono-cuando era conocido como barrio de Las Musas- y se ha convertido en uno de los lugares con más encanto de Madrid. Ya no solo están Los Gabrieles o el Villa Rosa, tabernas de azulejos y flamenco, que siempre está bien re visitar sino que en el eje de Huertas hay vinotecas, gastrobares con cocineros con estrellas Michelín y muchas tiendas interesantes, además de museos, teatros y conventos. Allí vivieron Quevedo, Cervantes y Lope de Vega, entre otros escritores insignes de nuestra Literatura.m, 


Cervantes, 28. Madrid.  Tel.: 91 186 36 32.

domingo, 13 de septiembre de 2015

Las tortillas de Gabino, las mejores de Madrid




Tradicionales, con pulpo a la gallega, trufadas, con espinacas, velazqueñas....es difícil elegir porque las tortillas de Gabino están todas buenas, jugosas y con una estupenda materia prima. Las hay con callos o torta del Casar y pimientos y otras rarezas pero siempre están en su punto de cremosidad, muy superiores a otras difíciles de tragar que ponen en Madrid. Este pequeño y acogedor restaurante de Chamberi es un sitio al que siempre apetecerá volver por el buen trato y su sencillez además de por su estupenda cocina. Las croquetas de boletus y el pescado están para no perdérselos, aunque la carta es corta y las estrellas son las tortillas, y hay una buena carta de vinos. Es cocina tradicional pero muy bien hecha. Recomiendo dejar un hueco para el postre y probar la torrija con helado de limón. Las tortillas de Gabino van desde los 9 a los 12,50 euros y en general el precio está muy bien para la calidad de la oferta. Para mi son las mejores que he probado junto las de las Bodegas La Ardosa, pero estas superan a las de la taberna de la calle Colón.
Los dueños llevan desde 2005 con el restaurante y creo que son familia del creador de La Ancha, un restaurante de cocina tradicional que está junto al Congreso de los Diputados, en la calle Zorrilla. Ellos rejuvenecen lo tradicional. Se llena así que mejor reservar.

Las tortillas de Gabino. Calla Rafael Calvo 20. Chamberí. Metro Rubén Darío. 
915 21 49 79








Salema y Burgau, la paz de dos de los enclaves pesqueros más bonitos del Algarve portugués

 
Salema es un pueblo en la playa, en una de las zonas más salvajes del Algarve portugués, junto a Vila Do Bispo y Sagres. Está muy cerca de Burgau y ambas localidades son pintorescos y tranquilos pueblos pesqueros de casas multicolores con cierto aire hippie y rodeados de espectaculares arenales como el de Cabanas Velha, una de las playas más bonitas de la zona. Hay playas a las que solo se puede acceder a pie con la marea baja, escondidas y casi solitarias. Mientras otras zonas del Algarve están saturadas de dificios y turismo, este area de la Costa Vicentina permanece casi salvaje aunque hay estupendos hoteles y buenos sitios para comer ubicados en lo que fueron antiguas viviendas de pescadores en una promenade sobre la playa y en lo alto de los acantilados que la rodean.En Salema cerca del mar hay un pequeño mercado donde se vende a diario pescado recien cogido: pulpo, sardina, lenguados, lubinas, róbalo... que trasladan los pescadores desde sus coloridas barcas de madera..el pueblo es un paraiso para los que buscan tranquilidad y huir de las multitudes disfrutando de la playa entre acantilados que protegen el pueblo de los fuertes vientos que azotan la zona. En Salema también son curiosas de ver las ruinas de una antih¡gua fábrica de pescado y de una villa romana.
También Burgau está protegida por grandes rocas que sirven de barrera natural al viento. Por la tarde, los bares de la playa se llenan de gente que quiere ver la caida del sol y disfrutar de alguna bebida o una buena cena. Este es un lugar perfecto para explorar el oste del Algarve y la costa Vicentina ya que esta a 90 kilómetros del aeropuerto de Faro y solo a 10 minutos en coche de Lagos. Tiene todo lo que se necesita para unas vacaciones, sol, arena fina, buenos restaurantes con pescado y unos pocos hoteles.Allí el día comienza y termina con el sonido de las olas del mar.